Conflictos bélicos y cambio climático. "La tierra pasa factura".

Por. Milagros Véliz

"La guerra debería ser un crimen y los que la instigan debería ser castigados como criminales".      (Charles Evans Hughes)

Los efectos del cambio climático ya son evidente, desde hace décadas se han ido sumando acontecimientos que, si bien han sido acelerados por las consecuencias que han dejado, también es cierto que esto se ya habían sido advertidos por millones de personas que saben lo que sería el futuro del planeta tierra si no se tomaban medidas a tiempo.  En consecuencia ya está con nosotros. Pero trataremos un punto y aparte que muy pocos nombran o simplemente no han caído en cuenta de que: hay otros factores que también afectan el equilibrio del planeta. Tocaremos muy brevemente el tema social y de conflicto. Si tomamos un referencias históricas, podemos ubicarnos en tiempo y espacio y ver cómo en los diferentes continentes a través del tiempo, cómo a partir de la Era Industrial (para tener un punto de partida) se han suscitados conflictos armados de grandes

proporciones, tal vez algunos pensarán que estos fueron en su momento y no trajeron ninguna consecuencia nefasta para toda vida existente, sin embargo no es así, cada vez que en cualquier región del mundo se suman algunos países a los conflictos bélicos o guerras, éstas traen como consecuencias deterioro y pérdida casi total o total en todo el medioambiente que le rodea: Ruinas, contaminación, desplazamiento, muertes y en algunos caso extremos "desolación". 

Las guerras  en su avance no sólo traen estos problemas; también fomentan la cultura de guerra y de destrucción en las nuevas generaciones, no se puede concebir implantar una cultura de guerra pretendiendo sostener unos principios ecológicos; lo primero se contrapone a todo principio de vida, la ecología es una cultura de  armonía y de respeto por todo lo que nos rodea,  manteniendo la paz. 

Es imperativo que se incluya el cese de armamentismo en el mundo, el uso de  armas químicas y nucleares. 

Estos conflictos que diezman ciudades y regiones enteras con todo lo que en ella hay debe también detenerse.  Esto también deteriora la vida en la tierra, sumándose en conjunto con otros factores.

 Todos hablan del CO2 de las energías fósiles y muy pocos hablan de los evidentes Conflictos Bélicos en muchas regiones del mundo. Es hora de que también entre en agenda, porque existe la posibilidad de que a alguien puede ocurrírsele la idea desquiciada de apretar un botón nuclear y borrar de la faz de la tierra lo que nos queda;  "La guerra destruye tierras de cultivo y fuerza su abandono, deja territorios sembrados de minas y explosivos, donde no se puede cultivar, y contribuye al agotamiento de recursos naturales y a la pérdida de biodiversidad" "La primera Guerra Mundial  acabó con el manto de la superficie territorial. Se deformaron los terrenos -la colina de Mort-Homme perdió 8 metros de altura-, los bosques fueron arrasados, al punto que hoy es imposible el desarrollo de cultivos".

La naturaleza no puede  defenderse de la maquinaria de la guerra, necesitamos un mundo en donde las diferencias sean tratadas con diplomacia y el uso de la palabra sea la paz como principio, sin armas.

E.mail: milagrosveliz.24@gmail.com

#LaPazComoPrincipio
#NoMásGuerras
#SóloTenemosUnoLaTierra

Fuente. Imágenes/Citas (web).